Dioxiclinic es una solución estabilizada de Dióxido de Cloro, con fórmula química: ClO², compuesta por un átomo de Cloro y dos de Oxígeno.

El dióxido de cloro puro es, a temperatura ambiente, un gas entre naranja y verde brillante, que se vuelve líquido debajo de 11°C y se congela a -59°C, formando cristales color naranja brillante¹. Solo es peligroso en su estado gaseoso, si se produce en cantidades industriales, ya que debido a la fricción entre sus moléculas, se descompone explosivamente cuando se mueve, cuando se expone a calor, radiación UV, o al sol en general, o a presión^{2, 3}, pero en solución acuosa es perfectamente seguro, aún en su máxima concentración posible que es de 8 g masa por 1 litro de agua.

Este compuesto ha sido estudiado meticulosamente desde su descubrimiento por múltiples laboratorios e instituciones en todo el mundo, dado que su estructura atómica y su comportamiento les pareció desconcertante, y producto de la experimentación se encontró que es un biocida altamente selectivo.

Cómo Funciona

Dioxiclinic es un biocida oxidante y no una toxina metálica. Esto significa que DIoxiclinic mata microorganismos por la interrupción del transporte de nutrientes a través de la membrana celular, no por interrupción del proceso metabólico (como la plata coloidal o el quelato de cobre, que también llegan a ser tóxicos para el ser humano). El Dioxiclinic esta protegido en soluciones acuosas facilitando su transporte y uso.

• La eficacia bactericida es poco a nada afectada con pH entre 4 y 10;
• Los productos especializados en limpieza de espacios con ClO² están en la lista de productos que protegen contra SARSCoV2, CoVid
• El Dioxiclinic es claramente superior al hipoclorito (blanqueador) en la destrucción de esporas, bacterias, virus y otros organismos patógenos en una base residual igual;
• El tiempo requerido de contacto para el ClO² es más bajo;
• El Dioxiclinic tiene una mejor solubilidad;
• Ninguna corrosión se asoció a altas concentraciones del Dioxiclinic. Reduce costes de mantenimiento a largo plazo;
• El Dioxiclinic no reacciona con NH³, amoniaco o NH⁴⁺ amonio;
• Destruye los precursores de trihalometanos y aumenta la coagulación;
• Dioxiclinic destruye los fenoles y no deja ningún olor distinto;
• Es mejor en separar compuestos del hierro y del magnesio que el cloro, especialmente en complejos límite;

Su mecanismo de acción es diferente a las toxinas minerales —como la plata coloidal (Microdyn®), o elementos y compuestos venenosos como el arsénico, aniones cianuros (como el cianuro de potasio, de hidrógeno o de sodio), bromo, mercurio, plomo, hierro y otros— que afectan el transporte de electrones de los metabolismos de bacterias y otros organismos mayores, impidiendo la respiración celular.

Dioxiclinic puede penetrar la pared celular, y actúa causando la interrupción de distintos procesos celulares: Reacciona directamente con los aminoácidos y el ARN de la célula; Descompone la estructura celular o los ácidos en el interior de la célula, evitando la formación de proteínas; Rompiendo la membrana celular; Cambiando las proteínas y grasas de la membrana; Interfiriendo en la respiración celular de las bacterias. O dicho de otra forma: podría destruirlas varias veces, de formas diferentes, todas muy eficaces.

Los virus son eliminados de manera diferente: el dióxido de cloro reacciona con la peptona, que es una sustancia soluble en agua que se origina en la hidrólisis de proteínas y aminoácidos, mata los virus mediante la prevención de la formación de proteínas, y es más efectivo en los virus que el ozono, el cloro y el hipoclorito⁶.

Se trata del agente oxidante más selectivo, ideal para el tratamiento, de aguas residuales, en su etapa final.

Existen formas estabilizadas que requieren la adición de algún ácido, cuya desventaja es que puede dejar en el agua potabilizada cambios en su potencial de hidrógeno (pH), que no es saludable para el consumo humano, y pueden reaccionar con otras sustancias en el sistema de drenaje y producir compuestos indeseables⁴.

La forma más segura de tener acceso a sus múltiples beneficios es produciéndolo in-situ, existen, entre otros, dos métodos prácticos y seguros para producirlo, ambos incluyen reactivos que son tan seguros como otras sustancias que manejamos de forma trivial todos los días, la gasolina del auto, el gas de la casa, el ácido muriático (Harpic®), el hipoclorito (Cloralex®) y hasta el termómetro de mercurio y el alcohol de curación, que, siempre que se usen correctamente —todos ellos—, lejos de representar un riesgo, son herramientas de uso diario que mejoran nuestra calidad de vida.

Casos de uso en el mundo

La planta de agua Niagara Falls en Nueva York, usa ClO² para desifección de agua potable desde 1944. Y en 1956 el ClO² fue popularizado masivamente en Europa cuando Bruselas, Bélgica, enfocó toda su actividad de potabilización de agua a esta solución limpia y segura.

Hace pocos años, tras el desastre causado por el huracán Katrina en Nueva Orleans y la costa del Golfo de México se uso en forma de gas para erradicar el peligroso moho causado por la humedad de las inundaciones, además de todos los gérmenes comunes a dichos escenarios.

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Dioxiclinic es estable a los cambios de pH en el agua que se trata con él.

Es más efectivo que el hipoclorito de sodio contra: Virus, bacterias y protozoos, incluyendo cysts de Giardia y los oocysts de Cryptosporidium.

Doxiclinic es mucho menos corrosivo que el Hipoclorito de sodio y muy superior para el control de la Legionela.

Es tan confiable su poder de desinfección que fue la solución primaria de descontaminación de edificios en los Estados Unidos tras los atentados con Antrax.

Incluso puede ser usado como enjuague bucal para tratamiento de infecciones orales y el mal aliento causado por estas.